Una Iglesia llena del poder del Espíritu Santo, que conoce y vive la Escritura (Santa Biblia), que predica con fervor el Evangelio, que descubre y usa los dones que Dios le ha concedido, que está en constante crecimiento, y en la que cada uno de sus miembros es feliz porque experimenta una relación viva y personal con Jesucristo.

lunes, 16 de junio de 2008

PROVERBIOS 31

PROVERBIOS 31 (en ocasión del día del padre)
¿Quién podrá hallar un esposo fiel? Porque su precio es mucho más que el de un Cadillac y hasta que el de un Rolls Royce. El corazón de su esposa está confiado en el, este en viaje de negocios o venga tarde a casa de la oficina. El les dedica sus mejores esfuerzos a ella y a su familia todos los días de su vida. El aprende a usar los instrumentos de su profesión y no teme a un día duro de trabajo. El es entendido en los asuntos del mundo y usa este conocimiento para el enriquecimiento de su familia. Se levanta temprano a orar y pedir sabiduría a Dios para sus gestiones diarias. Considera sus inversiones con cuidado y compra una casa o propiedades o hace negocios con los ojos puestos en el futuro. Se preocupa por su salud y hace la clase de ejercicios que necesita para estar en buena condición física. Su trabajo es de buena calidad aunque tenga que dedicarle unas cuantas horas más para que sea así. Nunca descuida su hogar. Se preocupa por los problemas sociales y trata de ayudar a los que se encuentran en necesidad. No teme los tiempos difíciles, porque ha aprendido a confiar en Dios y ha hecho lo que ha podido para satisfacer las necesidades de la familia. Se alimenta a sí mismo y tiene el cuidado de alimentar a toda su familia con buena comida material y espiritual. Su esposa es muy estimada porque él nunca la menosprecia. Ha encontrado un pasatiempo valioso que, al mismo tiempo que es útil, le ayuda a descansar. Es fuerte, honrado y alegre. Es fácil compartir la vida con él. Su conversación es prudente y alentadora. Hablar con amabilidad se ha convertido en una regla de su vida. Le interesan todas las cosas que se refieren a su familia, y no es perezoso ni indiferente. Sus hijos lo aman y admiran. Su esposa está orgullosa de él y dice: “Muchos hombres han triunfado en este mundo, pero tú eres el mejor de todos ellos. Si yo tuviere que vivir otra vez, volvería a casarme contigo”. La adulación es engañosa, y el buen parecer está solo en la superficie, pero el hombre que ama y teme a Dios, ese será alabado en verdad. Un hombre así, merece ser tratado como un rey, porque su vida demuestra que lo que él cree es verdadero.
Gladys Seashore