Una Iglesia llena del poder del Espíritu Santo, que conoce y vive la Escritura (Santa Biblia), que predica con fervor el Evangelio, que descubre y usa los dones que Dios le ha concedido, que está en constante crecimiento, y en la que cada uno de sus miembros es feliz porque experimenta una relación viva y personal con Jesucristo.

miércoles, 9 de marzo de 2011

Jesús Un mensaje que debe ser Compartido

Miércoles, Marzo 9, 2011

Lectura Bíblica: Lucas 2:8-18

No, no estuve allí cuando los ángeles cantaron aquella noche, pero al leer la narración que hace
Lucas sobre el evento, solo sé que quienes cantaron
estaban emocionados sobre el anuncio celestial. Lo que dijeron a aquel grupo de humildes pastores fue “Ustedes tienen que escuchar esto!”

Ahora, si estuviera usted planeando este escenario al otro lado del tiempo, ¿hubiera elegido como su primera audiencia a un grupo de gente tan discriminada, aislada de los demás, y quienes estaban tan sucios y mal olientes como pudiera estarlo un ser humano? Mucho se demandaba de los pastores, y poca era su remuneración. Un pastor tenía que encontrar pasto y agua en tierra seca y pedregosa. La protección contra el mal tiempo y los depredadores tenía que ser garantizada. Y ya que las ovejas tienen la tendencia a perderse y divagar a sus anchas, buscar un animal perdido era una labor demandante y que consumía gran tiempo. El pastor de turno era también responsable de restituir cualquier oveja que se hubiera perdido, a menos que el pastor pudiera alegar que las circunstancias estuvieron más allá de su control.

¿Qué hicieron ellos cuando escucharon la canción de los ángeles? Partieron a buscar el bebé en el pesebre. Nadie sabe cómo lo hicieron. ¿Se irían todos a la búsqueda? Los buenos pastores no harían tal cosa, sino que hubieran dejado la ayuda suficiente para asegurarse que sus ovejas estaban seguras. El resto entonces partió hacia Belén. ¿Cómo encontraron el establo entonces? Belén no era una ciudad grande, así que no hay duda de que fueron sólo a cada uno de los establos hasta que encontraron al recién nacido.

Favor notar que una vez que encontraron al niño tal como se les había dicho que sería, se emocionaron tanto que a cualquiera que les escucharan les dirían en alta voz, algo así como “Ustedes tienen que escuchar esto!”(v18) Mientras iniciamos nuestra Jornada de Cuaresma juntos, hágase la siguiente pregunta:

¿En qué momento me he sentido tan emocionado sobre Jesús y su historia que he tenido que decirle a alguien mas – “Tu tienes que escuchar esto”!? Mientras caminas con Jesús, puede que te animes a ser uno de los portavoces de Dios, así como lo hicieron los ángeles y los pastores.

Oración: Jesús, quita la venda de mis ojos, y ayúdame a entusiasmarme con el mensaje de las Buenas Nuevas. Amén.

Preguntas:
1. ¿Qué es lo que más te emociona acerca de tu relación con Jesús?
2. ¿Cuando fue la última vez que dijiste: “Tienes que escuchar esto!” – en relación con Jesús?

Rev. Dr. Richard E. Rusbuldt