Una Iglesia llena del poder del Espíritu Santo, que conoce y vive la Escritura (Santa Biblia), que predica con fervor el Evangelio, que descubre y usa los dones que Dios le ha concedido, que está en constante crecimiento, y en la que cada uno de sus miembros es feliz porque experimenta una relación viva y personal con Jesucristo.

martes, 15 de marzo de 2011

La enseñanza de Jesús


Miércoles 16 de Marzo del 2011

Lectura Bíblica: Mateo 5:17-20

Las primeras enseñanzas de Jesús en el “Sermón del Monte”, rápidamente generaron todo tipo de preguntas entre sus oyentes. ¿Es él el Mesías Judío? ¿Es un revolucionario que tomará el gobierno de Roma o acaso sea un auténtico profeta Judío? Puedo casi escuchar a Jesús iniciando estos versos en el Libro de Mateo con la expresión: “¡Tienen que escuchar esto!” “No piensen ni por un minuto que he venido a deshacer las Escrituras – ya sea la ley de Dios o de los Profetas. No estoy aquí para destruir, sino para completar… Hagan triviales aún el mínimo artículo de la Ley de Dios y se harán triviales a ustedes mismos. Pero, tómenlo seriamente, enseñen el camino a otros, y serán honrados en el reino. A menos que vivan mejor que los Fariseos en los asuntos que tienen que ver con tener una vida correcta, no sabrán lo primero sobre la forma de entrar al reino”. (Versión The Message)

¡Esta última oración captó su atención! Los Fariseos y maestros de la ley competían los unos a los otros en cuanto a ser estrictos. ¡Habían convertido la ley de Dios en 613 reglas! ¡Existían 248 mandamientos y 365 prohibiciones! ¡Todos estos reforzados con 1,321 adiciones!

Para evitar violar el tercer mandamiento, “No tomarás el hombre de Dios en vano,” se negaban a pronunciar del todo el nombre de Dios. Para evitar la tentación sexual, tenían la práctica de inclinar sus cabezas y no atreverse a mirar las mujeres. Ha escuchado usted sobre los “¿Fariseos sangrantes? ¡¡¡Les denominaron así dados sus frecuentes choques contra las paredes y otros objetos!!! Así que para no profanar el Sábado, ¡Habían 39 actividades declaradas ilegales para asegurarse de que no trabajaran en Sábado! Si usted hubiese estado dentro de esa multitud que se reunió para escuchar a Jesús dar su Sermón del Monte, ¿Cómo se hubiera sentido sobre esto? ¿Cómo podía la “gente común” alguna vez equiparar o superar la “rectitud” de tales hombres santos profesionales? El Sermón del Monte detalla exactamente lo que Jesús quiso decir, y estaba tan lejano de lo que ellos habían visto u oído, que parecía absurdo el permitirse uno mismo pensar que ellos pudiesen vivir de esa manera alguna vez.

Oración: Jesús, no hay manera alguna en la que pueda yo cumplir la “ley” en la forma en que tu lo sugeriste – ¿puedes perdonarme? Amén.

Preguntas:

1. ¿Cuáles partes del Sermón del Monte ha podido cumplir en su vida?
2. ¿Cuáles partes del Sermón del Monte son imposibles de cumplir (para usted?)

JesuCristo: Dios-Hombre, Hombre-Dios

Martes 15 de Marzo del 2011

Lectura Bíblica: Lucas 8:22-25

Al final de una semana de nuestra jornada con Jesús, ¿Camina usted junto a otro ser humano, camina con Dios, o es este Jesús una combinación de ambos difícil de creer? Los discípulos todavía no sabían. A menudo se desataban tormentas repentinas sobre el lago llamado Mar de Galilea. Los pescadores locales siempre permanecían más cerca a Capernaúm para poder lanzarse a un lugar seguro cuando enfrentaran una ráfaga repentina. Sólo cuando realizaban el viaje largo al otro lado era que enfrentaban el peligro de ser atrapados por una tormenta repentina.

Algunas historias antiguas narraban sobre indivíduos dispuestos a dominar aún las fuerzas de la naturaleza, pero estos eran meramente dioses hechos humanos. En la tradición Judía, aquél que gobernaba sobre los vientos y el mar era Dios (Sal. 107:29). Por supuesto, los dueños de barcos de hoy en día, o aquellos que nada saben acerca de embarcaciones, sino que son poseedores de vívidas imaginaciones, pintan a Jesús dormido en una litera o cama en una de las áreas de descanso bajo la cubierta. Obviamente, esto está muy lejos de la realidad. El único lugar en el que se podría tratar de dormir en una de las pequeñas embarcaciones de pesca Galilea con toda la lluvia generada por una tormenta sería en la popa elevada, en donde se podría haber utilizado el asiento cubierto de piel del timonel para recostar la cabeza.

¡¡¡Jesús debía haber sido un hombre sumamente cansado!!! Puedo vívidamente recordar cruzar en un gran transbordador desde Nova Scotia hacia Newfoundland con mi amigo, Bill Carpenter, en nuestra ruta a cazar venados. ¡El transbordador era lo suficientemente grande para ir cargado de automóviles y carros de ferrocarril! ¡Nos sorprendió una enorme tormenta con vientos de más de 70 mph! Se nos ordenó a cada uno a regresar a nuestras habitaciones. Nadie se aventuró a permanecer en cubierta. Estaba oscuro, y sin nada que hacer, tratamos de dormir. ¡Pero no hubo forma en el mundo, que ninguno de nosotros pudiera siquiera cerrar los ojos con todo aquel movimiento y balanceo! ¡¡¡Hasta bromeabamos entre nosotros sobre en dónde estaba Jesús cuando lo necesitábamos!!! ¡Estábamos asustados!

Los sermones predicados en el texto de hoy, casi enfatizan el poder inmenso de Jesús sobre toda la naturaleza. Lo cual, por supuesto es cierto. Pero en este pasaje se nos habla de que Jesús no sólo era humano, sino que sentía cansancio, ¡Se sentía tan cansado que podía quedarse dormido en circunstancias en las que yo no podría! Sí, este Jesús iba más allá de nosotros – era Dios en persona – pero al mismo tiempo, era tan humano como tú y yo – quizás aún más.

Oración: Jesús, es bueno saber que pudiste sentir cansancio, y que no hay problema con eso. Amen.

Preguntas:
1. ¿Qué sabe acerca de Jesús que le hace a usted pensar que él es Dios?
2. ¿Qué sabe usted acerca de Jesús que le hace a él igual a nosotros?